Jasper Philipsen (Alpecin Deceuninck) ha ganado la cuarta etapa del Tour de Francia, que finalizaba en Nogaro y se ha resuelto en un nuevo sprint masivo. E su segunda victoria consecutiva.

Adam Yates (UAE) sigue siendo el líder justo antes de empezar el tránsito por los Pirineos.

En la escapada más notable del día se han metido, a poco menos de 90 kilómetros para la meta, por dos hombres: Benoît Cosnefroy (AG2R Citroen) y Anthony Delaplace (Arkéa-Samsic).

El pelotón les ha mantenido a raya siempre buscando un nuevo sprint final. Les han cazado a falta de 25 para meta. Como ayer, en vista aérea, se han empezado a ver los diferentes bloques de los equipos con esprinters buscando su sitio.

Ahí ha destacado Luis León Sánchez, subiendo a Mark Cavendish, a 8 kilómetros de meta. Nervios, codazos y empujones a la orden del día en esos momentos.

Tiraba el Jumbo Visma y, sin embargo, Van Aert venía mucho más atrás. Al entrar en el circuito, final de la etapa, a 3 de meta, Jumbo seguía tirando y ha sido Mohoric el que se ha puesto a tirar. A 1,7 de meta, ha habido caída y se han caído Fabio Jakobsen y Guarnieri. Poco después ha habido otras dos más. Increíble en un circuito de carreras, ancho y bien asfaltado.

En el sprint final Jasper Philipsen, de nuevo fenomenalmente lanzado por su compañero Mathieu van der Poel, ha batido, por poco, a Caleb Ewan.

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