El madrileño conquista, contra todo pronóstivo, una gran ronda española
Chris Froome y Alejandro Valverde le acompañaron en el podio final
El italiano del Movistar, Adriano Malori, se hizo con la contrarreloj de Santiago
Luisle gana la clasificación de la montaña y Degenkolb, la del maillot verde

Alberto Contador se proclamó vencedor de la 69ª edición de Vuelta a España y sumar así su tercer triunfo en la ronda española tras los conseguidos en 2008 y 2012. El pinteño no tuvo problemas para aguantar su liderato en la contrarreloj de Santiago, donde se impuso el italiano Adriano Malori. Chris Froome y Alejandro Valverde acompañan al madrileño en el podio final.

El ciclista de Pinto vivió su particular Camino de Santiago en la Vuelta a España. El peregrinaje de Contador comenzó justo en el momento en que se cayó en la décima etapa del Tour de Francia, en aquel desafortunada descenso del Petit Ballon, cuando se fue al suelo y tuvo que renunciar a su gran objetivo de la temporada. Pero un campeón vive de marcarse retos y, pese a lo que aconsejaban los médicos, el madrileño quiso ponerse un nuevo reto: la ronda española.

Llegó algo mermado de condiciones y sin apenas haber cogido la bicicleta tras su lesión en la meseta tibial. Su lema fue entonces ir "día a día". Y así lo hizo. Etapa a etapa fue encontrándose mejor y ya en la crono inaugural en Jerez se le vio a buen rendimiento. Pasaban los días y en la novena jornada ya iba segundo en la general a tan sólo 3 segundos de Nairo Quintana.

La crono de Borja hizo que el colombiano tuviera que abandonar al día siguiente, haciendo que Contador se colocara como nuevo líder y se enfundara un maillot rojo que le acompañaría hasta la ciudad del apóstol. Su rival, Chris Froome, ya estaba a 1:18. Pero el británico no se rindió y le arañó tiempo en la Camperona. Fueron los días en los que presenciamos una nueva estrategia: subir los puertos de menos a más y obsequiarnos con grandes remontadas como también demostró en los Lagos de Covadonga.

Pero llegó la temida Farrapona. La dura ascensión era la prueba de fuego y Contador respondió a la perfección. Se hizo con el triunfo de etapa y amplió su liderato. Poco le inquietaron los segundos perdidos en Monte Castrove, porque en la penúltima jornada, con final en Ancares, el día del juicio final, el pinteño volvió a bordarlo. Ganó la segunda etapa reina y sentenció una Vuelta que era impensable para todos, incluido él.

La crono de Santiago fue su paseo triunfal. Terminaba así su exitoso Camino en un día donde el italiano Adriano Malori fue el más rápido. El día terminó con Contador en lo más alto del podio tras conquistar su tercera Vuelta a España y su sexta gran vuelta. Chris Froome y Alejandro Valverde le acompañaron en el podio, el mismo al que subió también para recoger el premio de la combinada.

El de los puntos fue para el alemán John Degenkolb, vencedor este año de cuatro etapas, y el de la montaña fue a parar a manos de Luis León Sánchez, del Caja Rural. Era el broche de oro de una gran Vuelta a España que respondió a las expectativas creadas desde un principio. La victoria se queda en casa y en manos de su nuevo patrón, Alberto Contador.




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