Alejandro Valverde ha vuelto a demostrar su calidad en un momento crítico de su Vuelta a España 2013. El gran test de la única contrarreloj individual de la ronda española, sobre 39 exigentes kilómetros con inicio y final en Tarazona, estuvo a punto de torcerse para el líder de Movistar Team cuando un pinchazo en la rueda delantera se cruzó en su camino tras apenas diez minutos de esfuerzo. “He realizado una contrarreloj muy buena y estoy contento. Salgo reforzado porque he hecho una gran crono”, confirmaba tras cruzar la meta.

Valverde: "Ha sido una crono muy buena para mí. Estaba bastante tranquilo y convencido de mis opciones. En Haza Llana más que malas sensaciones fue un tema de regular porque había entrenado mucho ese puerto. Por esos hoy sabía que si tenía buenas piernas iba a hacer una buena crono y así ha sido. Al principio me ha costado coger ritmo al principio porque el buzo que entrega la organización no me venía bien y no podía adaptarme al manillar. Desde los primeros kilómetros notaba la rueda delantera medio vacía e iba incómodo, desconcentrado. Una vez que la he cambiado, con los nervios al arrancar no atinaba a meter el pedal y al final se ha ido un pelín más de tiempo del normal. Estas cosas pasan en el deporte y una vez solucionado ya he podido coger mi ritmo.

Está claro que es una lástima porque podía haber estado más arriba, pero la contrarreloj que me ha salido es para estar contentos y ahora viene un terreno muy bueno para nosotros. Lo primero es recuperar hoy y luego ya pensaremos en las próximas etapas y en cómo mover la carrera".

Rápidamente asistido por el coche de equipo, el murciano recuperó rápidamente el ritmo y sus ganas de seguir escalando posiciones en la general le permitieron limitar las distancias con Nibali, a quien concedió sólo 27", y Roche (4''), así como ampliar su margen con Rodríguez (1'09'') y superar al líder saliente Horner (1'02'') tras un excelente 7º lugar en la etapa, a sólo 1'52" de Fabian Cancellara (RLT).

El murciano es ahora 3º en la general, a 46" de Nibali y a sólo 13" de Roche tras la jornada más desfavorable sobre el papel. Valverde mira ahora con ilusión a la alta montaña, que regresará el sábado con las etapas de los Pirineos. Antes vendrán dos días de aparente calma, comenzando mañana jueves con el duodécimo capítulo de esta Vuelta: 162 km entre Maella y Tarragona y la única dificultad del Alt del Collet (3ª) a mitad de recorrido.

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Alejandro Valverde solo ha perdido 27” respecto a Vincenzo Nibali, pese a pinchar en la primera parte de la contrarreloj –a 1:52 de Cancellara, y se sitúa tercero en la General a 46” del italiano.

“He realizado una contrarreloj muy buena y estoy contento. Salgo reforzado porque he hecho una gran crono”, confirmaba tras cruzar la meta.

“Me ha costado coger el ritmo al principio; el mono me quedaba pequeño y no me podía acoplar al manillar, aunque al final si he podido imprimir ritmo y sufrir”, añadía.

“Ahora viene un buen terreno, ahora hay que descansar y tener suerte”, anunciaba.

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