Joaquim Rodríguez volvió a demostrar que es ciclista más explosivo del pelotón. Froome es el nuevo líder y Contador, a 20 segundos, se le aproxima.

Joaquín Purito Rodríguez hizo valer su explosividad en el repecho que antecedía en un kilómetro a la línea de meta de Chieti. Un muro de un kilómetro al 12,2% de desnivel, con rampas de hasta el 19%. Allí donde la carretera se empina hasta lo imposible, no hay nadie como Purito. Lo ha vuelto a demostrar.

El corredor catalán antecedió en ocho segundos a Mollema, Contador, Santambroggio, Horner y Froome, que es el nuevo líder al ceder el polaco Kwiatkowsky. Contador, que ganó cuatro segundos de bonificación en la meta y otros tres en una meta volante, ya es segundo, igualado con Nibali, a 20” de Froome. Purito sube a la séptima plaza, a 55 segundos.

La etapa más larga de la carrera, 230 km desde Ortona a Chieti en 230 km, tuvo antes como protagonista a Damiano Cunego, que saltó con otros ocho corredores, entre ellos el español Flecha, a 22 km de la salida. Cunego los dejó a todos en la ascensión al Passo Lanciano (a 40 km de meta), que cruzó con 2:07 sobre Flecha y Schar y 2:30 respecto al pelotón a 2:20.

La persecución, conducida por el Sky de Froome, terminaría con la captura de Cunego a 7 km de meta y daría paso a la lucha entre los favoritos. Primero una pelea por los segundos en la meta volante, que ganaría Contador (3”) por delante de Nibali (2”) y Froome (1”). Enseguida llegaría un ataque de Kreuziger y Amador, a 4 km de meta. Neutralizados a 1,5 km, fue el momento en que aprovecho Purito para salir con un misil inalcanzable para los demás.

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